Médicos Seniors: El Sentido Humano de la Medicina

Como cada mes, la agrupación de médicos seniors realizó su encuentro de camaradería en el Club House del Colegio Médico para presentar un interesante tema con la tónica de siempre. Esta vez, la exposición estuvo a cargo el Dr. Plácido Flores quien se refirió al Sentido Humano de la Medicina.

Tras exponer con éxito este tema para dar inicio al año académico de la Facultad de Medicina de la Universidad Mayor, el Dr. Placido Flores, quien en la misma oportunidad fue homenajeado por la casa de estudios al cumplir 50 años de vida profesional, quiso replicar la exposición con sus pares, los que escucharon atentos una visión -común para muchos- expresada de manera extraordinaria y con el tono sereno que caracteriza al Doctor Flores

Su intervención, ahondó en el sentido humano de la medicina, la relación médico paciente y en la necesidad de mejorar la formación humanística de los médicos, principalmente la de aquellos que están dando sus primeros pasos en el área de la salud; resaltó la necesidad de escuchar al paciente, del acto terapéutico del saludo, de dar la mano, de ser cercano y percibir al paciente como un todo.

“el ser humano enfermo es una persona llena de incertidumbre, que sufre, que busca un trato humano y solidario, respetuoso de su dignidad”.

Entender las necesidades del paciente más allá de los exámenes, más allá de determinar a través de avanzada tecnología una dolencia o afección, reparar en escuchar, examinar, en darle el tiempo y la atención que necesitan. Volver a los orígenes en la relación médico paciente.

De este modo, también abordó el tema de la subespecialización médica, sin desconocer sus ventajas, profundizó sobre efectos contraproducentes, entre ellos, destacó la fragmentación del conocimiento y del paciente, puesto que según él, se corre el riesgo de despersonalización en la atención profesional, contribuyendo a la "ceguera" que impone no ver al paciente como un todo.

Para finalizar, realizó una reflexión, el autor escogido, Humberto Maturana y sus escritos sobre el amor fraterno. Del texto extrajo un párrafo que grafica la esencia de su presentación “Amar a un ser humano es ir más allá de su individualidad como persona; es percibirlo y valorarlo como una muestra de la humanidad entera, como una expresión del Hombre, como una manifestación palpable de esa esencia trascendente e intangible llamada “ser humano”, de la cual tu formas parte; es reconocer, a través de él, el milagro indescriptible de la naturaleza humana, que es tu propia naturaleza, con toda su grandeza y sus limitaciones; apreciar tanto las facetas luminosas y radiantes de la humanidad, como sus lados oscuros y sombríos; amar a un ser humano, en realidad, es amar al ser humano en su totalidad; es amar la auténtica naturaleza humana, tal como es, y por tanto, amar a un ser humano es amarte a ti mismo y sentirte orgulloso de ser una nota en la sinfonía de este mundo”.

Formar médicos integrales, con vocación, con valores. Cambiar el devastador pensamiento de las sociedades de consumo, donde predomina el racionalismo en la docencia y dar paso al tan necesario rescate de la confianza en la relación médico paciente y en el anhelado sentido humano de la medicina.